El viernes 12 de abril,por la tarde, y el sábado 13, por la
mañana, llevamos a cabo un denso programa, el lugar elegido, la Residencia
Militar “la Cortadura” fue un gran acierto, ya que reúne unas condiciones
óptimas para el desarrollo de las actividades.
Comenzamos el viernes por la tarde con una oración para dar
paso a la ponencia: “La crisis como
reto, la crisis como oportunidad”, a cargo de Francisco Lorenzo, de Cáritas
Española.
Comenzó manifestando que ya el título da un poco de miedo
porque conlleva o escode también mucho dolor, sin embargo es necesario buscar
una explicación a la crisis, conocerla bien para poder darle respuestas
acertadas y eficaces.
¿Qué es lo que se ha roto?, porque hasta el año 2007 se
vivía con la impresión de estar en un mundo seguro y que el progreso no se
detendría. Para darnos una idea del tipo de batalla frente al que nos
encontramos acudió a la bíblia, al libro de
Samuel, cuando Israel se enfrenta a Goliat y este les dice a los
israelitas: ¿para qué salís a disponer la batalla?...
Pues Francisco, el ponente, igual que David no se asusta por
la amenaza de Goliat, ya que confía en Dios, se enfrenta a esta crisis
amenazante, terca, que causa ya miles y millones de desgracias humanas y
materiales. Y, como para atacar con
éxito hay que conocer al enemigo, el ponente expuso a continuación las
debilidades que mostraba ya el sistema en aquella fase de crecimiento entre los
años 1994 y 2007: no se redujo la pobreza, los indicadores de la exclusión
social aumentan, crece por tanto la desigualdad social. Los contratos de
trabajo son precarios, las rentas del trabajo disminuyen a la vez que aumentan
las rentas del capital. De este modo no se puede decir que el Crecimiento es
igual al desarrollo (más no es igual a mejor)
Por esto es necesario no volver a la situación anterior a la
crisis, para evitar una nueva crisis habrá que corregir los fallos de esta.
Primeros síntomas que presenta esta crisis: ¿Es coyuntural o
estructural? La realidad es que ha habido cambios irreversibles que se
manifiestan en una pérdida de valores y la implantación de otros nuevos, que no
tienen al hombre como centro, y están
afectando seriamente a la sociedad. Hemos pasado a una sociedad de pobreza: el
desempleo es no sólo masivo sino cualitativo, antes afectaba más a los trabajos
domésticos o del sector terciario, hora afecta a los trabajos en la industria
que supone una pérdida de ingresos mucho mayor para las familias.
¿Cómo podemos salir de esta? Se nos plantea el ahorro en vez
de la inversión, pero ya vemos que esa solución no evitó la crisis que
padecemos, es necesario adoptar un nuevo modelo económico, que vuelva a poner
al hombre en el centro y desplace a la dictadura de la economía.
Las características del modelo económico vigente son: - que
cree que más es igual a mejor, - confunde
valor y precio, siguiendo la lógica del mercado; - ofrece una sociedad del
placer, no merece la pena sufrir por nada, así se difunden ideas como el
relativismo, el hedonismo, que han llevado a una deshumanización de la
sociedad; la tiranía de la imagen que ha sustituido al contenido, y facilita la
manipulación; -todo tiene fecha de caducidad, no importa el ser, aquí nos
ofreció dos aportaciones muy ilustrativas: “los productos duran lo que un
matrimonio”, y la imagen de los dos tipos camiones que se ven en nuestras
ciudades: los que van a un centro comercial, o los que van al vertedero…En el
modelo económico vigente se ve normal privatizar las ganancias y socializar las
pérdidas. Faltan pues proyectos comunitarios, es un reto ineludible salvar a la
persona(G et S) y salvarlo en comunidad, la primera la familia.
Riesgos y tentaciones: sobrevivir a cualquier precio, hacer sólo aquello que se
nos reconoce, y trabajar desde sus
soluciones.
Por eso hay que denunciar, ofrecer valores alternativos, dar
testimonio y vivir de forma distinta, ofrecer otra concepción de la persona.
Algunos caminos y recorridos: vuelve el conferenciante al
libro de Samuel, a la respuesta de David, y nos anima a presentar batalla a
este modelo social deshumanizado: cada cosa, por pequeña que sea, sirve para
cuestionar el sistema.
Tras un descanso trabajamos por grupos para tratar de
resumir en un slogan el rico contenido de la ponencia, por supuesto que la mayoría de las frases invitaban a seguir
trabajando con humildad y confianza en el amor de Dios, que es inagotable.
A continuación hubo cena y después velada y convivencia para
quienes optaron por hacer noche en la Residencia, mientras otros nos fuimos a
casa hasta la mañana siguiente.
El sábado cada uno asistió a uno de los cuatro talleres
programados: 1 de autoayuda…,2 de autoestima…, 3Acompañamiento y…4 Intervención
familiar…
Yo asistí al taller de “autoestima y crecimiento personal”
que tenía como Docente a Matilde Carballo, de Cáritas Regional de Andalucía.
Voy a desatacar sólo aquellas frases que más impacto
causaron: Una persona definió nuestra labor en cáritas así: “…nos buscamos,
ellos nos necesitan y nosotros los necesitamos a ellos, nos atraemos como un
imán, así nos enriquecemos todos”. La verdad es compartida, aprendemos
mutuamente; debemos dar oportunidades hasta setenta veces siete…Vamos a dar
nuestro tiempo no a llenar nuestro tiempo. Debemos pensar que la persona es el
primer recurso con que contamos, aquí nos dijo la Docente una frase muy útil
para aquellos casos en que más les cuesta poner de su parte: “has movido a todo
el mundo y no te has movido tú”…”Hace falta tener una buena meta para encontrar
el camino”…
El taller fue muy
participativo, yo creo que todos salimos satisfechos, aunque naturalmente
algunas cosas no se resuelven en un taller y siempre la realidad nos
sorprenderá con casos especiales en los que el voluntario pondrá lo mejor de
sí.
Por lo que pude saber el resto de los talleres también
fueron bien aprovechados.